Casa Aramara es un espacio que ofrece a las mujeres y a sus bebés un ambiente tranquilo, seguro y adaptado a sus necesidades.
En Casa Aramara seguimos los principios de atencion del parto en casa y la filosofía del modelo de partería.
Acompañamos a las mujeres en las etapas del embarazo, parto y posparto.
Buscamos que las mamás y sus familias se sientan cómodas, tranquilas, en confianza y seguras para que el trabajo de parto y el nacimiento fluyan con los ritmos que la naturaleza marca.
Ser un espacio que ofrezca a las mujeres, sus bebés y las familias un ambiente tranquilo y seguro para acompañar procesos de salud sexual y reproductiva incluyendo las etapas de gestación, parto y postparto bajo el modelo de partería y respetando las necesidades particulares de cada una.
ser el referente de la partería en México buscando el respeto de los derechos humanos, sexuales y reproductivos de la población.
Colaborar para la erradicación de la violencia obstétrica.
Reducir el número de cesareas.
Reducir el índice de morbi-mortalidad materno y neonatal.
Incrementar la satisfacción de las mujeres y sus familias en la experiencia de gestación, parto y postparto.
Honestidad.
Respeto.
Corresponsabilidad de la salud.
Empatía.
Dignidad.
Directora - Partera Profesional
Partera Profesional - Medicina Tradicional
Partera - Educadora Perinatal
Educadora Perinatal - Doula - Terapeuta de Canto - Partera Autónoma
Doula - Partera Autónoma
Partera Profesional
Cuando mi novio y yo decidimos embarazarnos, no teniamos idea de que estábamos a punto de entrar en un mundo totalmente desconocido. Yo sabia que queria tener un parto vaginal y siempre pensé que sería en un hospital y con anestesia. Cuando supimos que teníamos ya un bebé en camino, empezamos a leer sobre embarazos y partos. Compramos libros, vimos documentales, investigamos en internet... Y comenzamos a enamorarnos de la idea de tener a nuestro hijo de la forma más natura posible. Queríamos poder ser participes del nacimiento de nuestro bebé, no solo espectadores. Encontamos una dula en internet que nos recomendo con María en Casa Aramara. Hicimos una cita con ella para conocernos y el click fue inmediato. No tuvimos que pensarlo dos veces. En ese momento decidimos que nuestra bebé nacería en Casa Aramara. A lo largo de los 6 meses que quedaban de embarazo, nos atendierón María y Francesca. El trato que recibimos fue hermoso. Humano. Contaba los días del mes para ir a verlas. No solo se preocuparón por sabes si tenia un embarazo sano (Lo cual hacen a la perfección).
La llegada de Violeta:
Hacía varias horas que el trabajo de parto se había vuelto muy intenso, unas 3 o 4 tal vez, y yo estaba ya dentro de la tina. Al llegar a Casa Aramara unas horas más tempran, parecía que se alejaba un poco. "No te preocupes, es normal: la salida de tu casa, llegar aquí con mas personas... ahorita se meten al cuarto y se relajan, no hay prisa, too pasará cuando tenga que pasar", dijo María. y así fue, solo quedarnos solos en el cuarto las contracciones regresaron y s fueron haciendo cada vez mas fuertes. Carlos guió una meditación muy linda sobre abrirse a recibir la vida, que sirvó como un puente hacia ese estao de conciencia y conexión irracional que solo he experimentado durante mi parto anterior y en este. Mientras me preparaba y emprendía el viaje, escuchaba las palabras de Carlos y sentía las manias de Itzam acariciarme en cada contracción. Después, todo fue una danza de movimientos y sensaciones.
Enterarnos que esperabamos a Bruno, sue la noticia mas increible de nuestra vida, asi que a partir de ese momento destinamos todo nuestro amor, nuestro esfuerzo, nuestras energías y nuestra vida en él. Ello comprendía por supuesto buscar la mejor atención para supervisar su crecimiento y su llegada. Comenzamos la atención con un ginecologo tradicional, en nuestro pensamiento creímos que, como todos, ir con un médico a un hospital era nuestra mejor opción, la mas segura por cualquier complicación (nuestra mente tratando de engañarnos pensando en complicación) pero nuestro corazón en gestación de ser papás nos decia que debiamos confiar, creer y caminar seguros de que sería un embarazo sano, fabuloso e increible. Asi que contactamos a Casa Aramara donde María y Francesca, se convirtierón en nuestras parteras estrellas y en esas guías amorosas de esta maravillosa aventura, al conocer a estas dos GRANDES MUJERES no teníamos ni idea de lo especiales que serían para nuestra vida, su amor y pasión por su trabajo, nos llevo a recorrer los mejores meses de nuestra vida durante esta dulce espera.
¿Quieres donar para que alguna familia de escasos recursos económicos pueda ser atendida bajo el modelo de partería?
Tu aportación puede ayudar a que mas mujeres tengan una experiencia de parto positiva y que más bebés lleguen a este mundo en un ambiente de armonía y respeto.